EL DERECHO
A RENUNCIAR A LA PENSIÓN
Las elecciones al
parlamento europeo suelen ser aquellas en las que es mayor el número de
personas que se abstienen de votar.
Más, con ser ese un
gran problema, es más preocupante el hecho de que todas las elecciones que se
celebran en España tienen el lastre de contar con una abstención elevada (que
se ha dado en denominar: “abstención estructural”).
Es cierto que,
justificado como derecho a la libertad, en España no se hace obligatorio el
votar (cosa que si ocurre en algunos países).
Es decir, renunciar
al derecho al voto (el derecho a votar) se ve como algo de lo más natural. Pero
¿es éste derecho algo de poca monta?
Supongamos que alguien, al llegar a la edad de su jubilación,
y teniendo derecho a cobrar una pensión que le permita vivir, renuncia a
cobrarla.
¿Puede hacerlo?
Supongo que si (aunque a lo mejor un paso tan serio, un derecho tan importante,
es irrenunciable, algo a lo que no se puede decir NO sin pasar por el
psiquiatra).
Naturalmente el
derecho al voto y el derecho a cobrar una pensión no parecen cosas comparables
(por aquello de que más vale
pájaro-paga- en mano, que ciento –de promesas-volando).
Sin embargo, si
repasamos la Historia, a lo mejor el derecho al voto es un derecho
importantísimo, al que sólo es entendible que renuncien los anarquista y
libertarios por convicción ideológica.
Porque veamos.
Aunque ninguno seamos expertos en Historia todas y todos sabemos que lo primero
que hace una Junta Militar al dar a luz
una dictadura tras un golpe de estado,
es el prohibir que el pueblo (tú) puedas votar (tan es así que por eso sabemos
que en Cataluña nunca hubo golpe de estado puesto que a nadie se le prohibió
votar).
Considerando que los padrinos de los golpes de estado son
gente muy rica (que paga a quienes apoyan y ejecutan el golpe) y que “tanto
tienes tanto vales”, hemos de aceptar que (los golpistas) son personas muy
inteligentes o al menos muy bien asesoradas.
Y entonces la
pregunta siguiente debe ser ¿Por qué lo primero que hacen es prohibir que se vote
si el votar no tiene importancia, si votar es un derecho de chicha y nabo?
Exacto, acabas de
reparar en el meollo del asunto: el votar es un derecho fundamental y
trascendente. Y por eso lo prohíben.
Tal vez no se vea
como algo tan importante como la pensión por jubilación. Pero lo es, entre
otras cosas porque con tu voto puedes hacer que tu pensión (por poner un
ejemplo) mejore o empeore (y no te digo nada la de tus descendientes y
nietos/nietas).
Es cierto que estás
asqueado con lo que llamas la clase política, incluso has llegado a la
conclusión de que todos los políticos son iguales y que encima no cumplen sus
promesas.
Pero sería bueno que
repararas en si esas conclusiones tuyas (¿son tuyas?) o han sido inducidas por
los poderosos (los que financian los golpes de estado) precisamente para que no
votes (porque además, curiosamente, ellos no dejan de votar).
No obstante, como me
llevaría mucho tiempo convencerte de que no todos los políticos son iguales, te
voy a dar un consejo para que elijas tu papeleta de voto, ya que debes votar.
Aceptemos como animal de compañía que todos los políticos
son iguales, vale. Pero reconocerás que todos los programas son distintos. Así
que, léelos o escúchalos, y vota el mejor programa para ti. Pero ojo, vota el
mejor para ti. No empieces a pensar que un programa demasiado bueno no es
creíble, porque entonces resultaría que todos los votantes son iguales: Dóciles
esclavos.
Paco
Molina. Zamora. 27 de Mayo del 2024
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