ORGULLOZA. ORGULLO ¡ZAS!.
Por fin. Este 28 de
Junio salió en Zamora la primera manifestación para celebrar, reivindicar y
poner sobre la mesa lo que en todo el mundo es conocido como el Día del
Orgullo.
Tal vez no cuajó
antes por la dureza de ésta tierra, y porque aquí el 28 de Junio de cada año
coincide con la víspera del patrón de la villa y romper tal encanto pues daba
corte.
Pero esta vez (casi
50 años después de la primera manifestación que hubo en España defendiendo
estos derechos) hubo manifestación, desfile y si me apuran cabalgata, de lo
animada que estuvo la cosa.
Con la autoridad
moral que me da ser un experto, por observación, organización y disfrute de
distintas manifestaciones (algunas de un único elemento con un rollo de papel
higiénico) afirmo que esta primera salida a la calle de las y los y les
LGTBIQA+ ha sido un fenomenal éxito.
El número de
personas, más de un centenar entre gentes de los diversos colectivos y personas
solidarias con la temática de la convocatoria (respeto y defensa de todo ser humano
sea cual sea su composición hormonal o apetencia sexual) superó todas las expectativas
de las organizadoras.
De ese más de centenar
y medio de manifestantes quienes portaban megafonía, pancartas, e incluso
atuendos alusivos al Orgullo de ser como se es (o sea de no querer ser “un
esclavo del qué dirán”, ni de otras supersticiones) mostraron una energía,
alegría, caligrafía (textos de las pancartas) y valentía que desde el primer instante
convirtieron su día en una fiesta.
Tanto es así que cuando
la comitiva avanzaba por la columna vertebral de las concurridas fiestas de San Pedro 2025 (desde la Marina hasta la
Plaza Mayor) el numerosísimo público debió creer que estaba ante la n-sima
charanga. Ocurriendo que las gentes al caer
en la cuenta de lo que se contaba (viva la libertad de verdad) mostró su
simpatía, respeto y solidaridad (sin oírse ni un solo comentario en contra o
inadecuado). ¡¡Viva Zamora!!
Este dato, el de que
el público que vio la manifestación reivindicativa fue numerosísimo, ha tenido
una gran importancia para los objetivos del colectivo LGTBIQA+.
Incluso muchas
espectadoras les preguntaron, ¿pero también estamos aquí? ¿Cómo podemos
contactar? Y es que acababan de renacer en Zamora tras varios intentos abortados
(“Sonríe tú”, etc). De hecho han tenido su primera reunión éste mismo año. Y lo
suyo ha sido todo un “orgullo ¡ZAS!”. Un, aquí estamos, a cara descubierta,
porque no somos menos que nadie. Orgullozas.
Como ya hay internet
y se puede consultar todo desde el móvil, dejo para ustedes el descifrar el
significado de las siglas LGTBIQA+, limitándome, en cuanto que soy (aunque
jubilado) profesor de matemáticas a explicarles qué significa en ese acrónimo
el signo “+”
En efecto es el
signo de “sumar” y lo han decidido poner (no en Zamora sino en todo el mundo)
para dejar la puerta abierta a todas las
personas que hasta ahora se han protegido (escondido) metidas en algún tipo de
armario ante la incomprensión social.
Sin ir más lejos, quienes tienen alguna discapacidad ya reclaman su derecho a
gozar de ese instinto básico que como
animales tenemos todos y que no es otro que “el deseo de disfrutar del deseo” (necesitando
para ello ayudas especiales).
Lo que mejor explica
la vida es la teoría de la evolución. Por tanto dentro de la misma especie
(incluida la humana) van a aparecer, al
margen de lo que nos constituye como
personas, mil factores secundarios que no anulan lo principal: que en lo
fundamental todos somos iguales y nos debemos ayuda, amistad y afecto.
PD: Sólo hay otro
instinto básico tan fuerte como el de querer disfrutar del placer sexual, el de
supervivencia. Defendámoslos.
Paco
Molina. Zamora. 28 de Julio del 2025