LA ESCORIA DE LA SOCIEDAD Y LA SANTÍSIMA TRINIDAD.

LA ESCORIA DE LA SOCIEDAD Y LA SANTÍSIMA TRINIDAD.

Estaba mi mente colocando las piezas para escribir un artículo titulado “Las tetas están politizadas” (referente al asunto del top less en las piscinas), y se me ha cruzado en el camino un escrito de don José Ángel Rivera De Las Heras criticando la celebración del Transgress Fest por 3ª vez en la Plaza de la Catedral.

Dado que Don Ángel escribe con una cierta gracia, me leí éste y el otro artículo emitido por él, también en La Opinión de Zamora.

Por lo que me siento en la obligación (moral) de llevar la paz a este buen ciudadano.

Empecemos por decir que no escribo en nombre del Ayuntamiento, ni nada parecido, aunque si, y antes de seguir, creo que es bueno ofrecer otros puntos de vista a dos de sus afirmaciones.

Dice que la plaza de la catedral es de todos y no del Ayuntamiento (en exclusiva). Hombre pues sí, pero es como la catedral, que es la Casa de Dios, pero alguien la tiene que gestionar  a falta de Dios (que la gestione) y por eso la gestionan ustedes.

Con gran osadía dice que el concierto de marras (Transgress Fest) no debería ser financiado con el dinero de todos puesto que no a todos gusta. 

Estando la osadía de su razonamiento en que viene precisamente de una entidad (la Iglesia Católica) que por un lado no paga impuestos y por otro recibe dinero de todos a mansalva.

Pero vamos con el evento. Como la mayoría no sabe de qué va, cuento mi experiencia. He ido a los 2 que hasta ahora se han celebrado. Sólo estuve al comienzo de cada uno, 2 o 3 canciones.

Supongo que Transgress Fest significa Festival Transgresor (que actúa en contra de una ley, norma o regla) y en esa línea, en el del año pasado, un o una artista, de gran calidad, escandalosamente vestida (o sea muy desnuda), cantaba algo así como que le gustaba que le dieran lametazos en el clítoris (hablo con mala memoria) y en esto, de la catedral, salieron varias personas, de ambos sexos, que por fuerza debieron sentirse escandalizadas por esa plática tan distinta  a la del púlpito.

La artista, al caer en la cuenta de esa fatídica casualidad se disculpó con gracia y respeto, manifestando que todo había sido pura coincidencia (como así fue).

(No obstante fue esa casualidad la que desató las iras de ciertos files).

Pero sigamos: Supongo que así tendrán ustedes, queridos lectores, una idea algo mejor formada del tipo de Festival que es el Transgresst Fest.

Pues bien dado que ese tipo de espectáculos que podríamos encuadrar en lo que durante la dictadura se llamaba la Escoria de la Sociedad (por cierto yo tuve un programa de radio que llamé así en la COPE, o sea que no se pretende ofender a nadie) son de “rompe y rasga” Don Ángel dice que no deben celebrarse en la Plaza de la Catedral (llamada así por tener una catedral al lado, de la misma manera que se llamaría de la Cárcel de tener una cárcel).

Y sugiere celebrarlo en el auditorio Ruta de la Plata, a pesar de que él mismo dice que el Transgrest Fest es minoritario (y lo es) con lo que se rompería una norma de conducta del Ayuntamiento, que es enviar allá lejos solo lo que sea presuntamente mayoritario o espectáculo de masas.

Aunque más bien, sospecho, que lo que pretende Don Ángel es que no se contagie el grito de libertad de esta gente, y del que hablaremos.

Seguimos. En su afán por alejarlo de la Catedral, el ministro del señor sugiere la Plaza Mayor.

Osú, mi arma, pero si en la plaza Mayor hay una Iglesia también, ¿o ésta no es la Casa de Dios?. 

Pero hay más, en la Plaza Mayor se produciría lo que es el peor de los pecados el escándalo (quien escandalizare a una de estas criaturas más le valdría atarse una piedra al cuello…).

Sin duda alguna, estos transgresores serían los primeros interesados en actuar en la mismísima Plaza Mayor para predicar  su evangelio (que lo tienen y se llama “libertad”) en vez de en un rincón de la ciudad donde sólo van los suyos.

Es decir, de nuevo vemos que “Dios escribe derecho con renglones torcidos”, resultando que sin pretenderlo, el Ayuntamiento ha enviado a un lugar remoto a unas gentes que vienen a transgredir nuestro orden tan pacato y reaccionario   .

Sí, porque en la plaza de la Catedral se celebran casi todos los acontecimientos del Verano Cultural ya que es un lugar siempre vacío (o casi) donde cualquier concierto o actuación se puede ofrecer sin crear molestias (salvo que las piedras de la catedral sean más sensibles que las de San Juan) y encima en un marco incomparable.

Aunque todo lo dicho no nos exime de reconocer que el que en Zamora el Transgress Fest se celebre junto a la Catedral es un milagro (hecho inaudito que viene bien a efectos de divulgar la doctrina, como muy bien sabe Don Ángel).

Si, porque el orden que quieren transgredir estas gentes (por el bien de todos por cierto, pues la libertad es sana) es un orden en el que la Iglesia Católica ha tenido mucho que ver, y en algunos casos diabólicamente (Inquisición).

La obscenidad, la frase clara como el viento, la comunicación de las ganas que se llevan dentro, etc. son cosas que se dan de bofetadas con las cadenas que le ha puesto al espíritu (y a la carne) esta Institución metiendo miedo desde niños a los humanos (y más a las niñas) con principios antinatura que encima si no cumples te condenan al fuego eterno.

Así que, aunque fue de carambola y sin querer , bendito milagro éste de que los que quieren transgredir nuestro orden moral puedan hacerlo una vez al año junto a la sede del partido que quiere que llevemos una vida sin vicio y con cilicio.

Y luego dicen que no existe la Divina Providencia.

Paco Molina. Zamora. 21 de Agosto del 2019