VIVAN LAS CADENAS

 EL POSTRE NO ES EL FINAL.

Cuando la cená… ya se acabe

Cuando ya hayamos… comido

No te mires el ombligooooo

Que la fiesta  va a empezar

No te mires el ombligoooooo

Que el postre no es el final

Y en efecto así será: tras cenar….vendrá el Brindis de la Suerte,

Y es que la crisis se veía venir. Hemos vivido por encima de nuestras posibilidades.

Y hemos vivido por encima de nuestras posibilidades porque no hicimos caso de nuestros antepasados que nos lo habían advertido con contundencia.

“Vivan las caenas”. Gritaba el pueblo español –allá, cuando el reinado de Fernando VII- advirtiéndonos con sus voces y su sabiduría “de lo que se nos venía encima”.

Pero los liberales tuvieron que estropearlo todo con su manía de que era mejor defender las libertades: la libertad de elección de centro, la libertad de elección de médico.

Si, porque por el uso, o mejor,  “mal uso”, de las libertades, nos vemos en la encrucijada que nos vemos que: nos van a tener que sacrificar por nuestro bien.

¡¡¡Con lo que sufren ellos cuando nos sacrifican!!!  Como si para ellos no fuera sacrificio el sacrificarnos.

Y todo empezó allí, en la época de Fernando VII, cuando el pueblo gritaba-sabio él- VIVAN LAS CAENAS- y los ilustrados seguían con sus bobadas de la libertad para la elección de médico y la elección de centro.

No hicimos caso a los buenos, a los de fiar, a los nuestros: al pueblo y así estamos.

Porque, con claros engaños, nos han llevado de la libertad de elección de centro, a la libertad de elección de médico, y por último a la más decadente y antisocial: a la libertad de elección de retrete.

Porque fue cuando empezamos a “renegar de las cadenas” cuando empezó nuestra decadencia y el vivir por encima de nuestras posibilidades.

¿Qué tenían de malo las cadenas?. ¿Qué tenia de malo la cadena de cada uno de nuestros cuartos de baño?. Nada. Incluso nos ayudaban a crecer, cada vez que mocosos y mocosas aún, nos estirábamos sobre las puntillas para tirar de ella. Para “tirar de la cadena”. Tan locos fuimos abandonando aquellas prácticas y derechos adquiridos tras siglos de lucha, que muchos ni sabéis que es eso de “tirar de la cadena”.

¿Acaso ofendía a alguien el tirar de la cadena?. No, y rotundamente NO.

Además la cadena nos hacía a todos iguales, salvo pequeños detalles como el mango, que según la clase social podía ser más o menos sofisticado, pero la cadena, con su cisterna rugiente arriba, no nos había hecho nada malo.

Y vino algún imbécil y la suprimió, arrastrándonos por la senda actual; haciendo que viviéramos por encima de nuestras posibilidades. Destruyendo el medio ambiente y nuestro bolsillo.

¿Sabéis lo que supone haber bajado la cisterna a ras de taza?. Que para que no se vea el artilugio que lleva dentro ni el agua semiputrefacta que alberga, se ha añadido al water una tapa que por lo que pesa debe consumir, cada una, todo el CO2 del mundo, la desgraciada, con lo que  ahora el artilugio supone un consumo exagerado de energía, materia, y sentido común.

Y encima, con no estar contentos con ese paso absurdo de vivir por encima de nuestras posibilidades, consumiendo CO2 como burros, para vivir sin cadenas. Encima, decimos, y decimos bien, ahora le han puesto al artefacto dos o no se, si tres secciones de botón, para que aprietes aquel, según el agua que necesites, y que quede todo limpio. Dos botones en uno, que como te vuelves loco para acertar cual es el adecuado, al final aprietas todos, cagándote en el maldito día en que nos quitaron las cadenas.

Y no vale decir que dejando de “tirar de la cadena” se ahorró el plomo de la tubería que bajaba de arriba abajo. Mentira, primero porque ese plomo se usó para balas ¡¡malditas guerras!!! Y luego porque todos sabemos que ya se han inventado las tuberías de PVC  en este caso  de  “PWC”.

Por eso, amigas y amigos, volvamos a la realidad, vivamos por debajo de nuestras posibilidades, volvamos a las cadenas. Gritemos  por nuestro bien ¡¡Vivan las caenas!!...y saldremos de la crisis.

Y dicho esto:

Se sugieren como Temas de conversación: Primer plato : ¿Les gustan realmente   a las mujeres los hombres sin pelos en la lengua?. Segundo plato: ¿Ganaría Zamora si además de los conocidos existiera el Cristo de las Lujurias?

Y por lo demás: Comed y bebed que esto no son ni mi cuerpo, ni mi sangre

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