Sr. Director: Lo que sigue es un escrito, por si le place publicarlo en cualquiera de las secciones del diario que dirige: EL MUNDO.
Salud con suerte
PAISANOS Y MUNDANOS
Cualquier estudio de sociología detectaría un fenómeno tan evidente, pero del que tal vez da miedo a hablar.
Dicho fenómeno no es otro que la "división transversal" que se está produciendo, en todos los ámbitos, entre los lectores (generalizamos para facilitar la explicación, como se hace en todas las ciencias), entre los lectores se decía, de los periódicos El País y EL MUNDO.
Hay que referirse a esta división (a éste partirse en dos, en el sentido de tomar partido) como “división transversal” en el sentido siguiente: La línea divisoria no coincide con las fronteras políticas, o sindicales, ni incluso con las "futboleras", sino que se trata de una línea, de una división, que atraviesa las anteriores transversalmente.
Es decir, hay gentes del Partido X que leen uno de los periódicos citados y otros leen el otro, hay gentes del Sindicato Y que lo mismo, y por supuesto hay gentes, forofos, del Equipo Z que idem de idem.
Aclarado el término transversal, se debe profundizar ahora en el término división.
¿Quedan divididos los militantes del Partido X, los del Sindicato Y, o los del equipo Z en dos bloques: el de los que leen el País y los que leen El Mundo?.
Expuesto de otra forma (y eliminando a los que de entrada optan por uno otro periódico porque ya ellos se ven como diferentes) preguntémonos:
¿La elección y la lectura asidua de uno u otro medio de comunicación, va a socavar, va a marcar diferencias, dentro de la unidad que es el partido, el sindicato o el equipo?.
La respuesta es que sí. Un sí rotundo y grande. Véase en qué se aprecia.
-La primera hipótesis a aceptar debe ser la de que ninguna persona que se vea a sí misma como conservadora lee estos periódicos (esas tienen el ABC).
Estamos hablando pues de un conjunto social que va del, en términos políticos, liberal-de-derechas al libertario- de-extrema-izquierda; pasando por el liberal-liberal, el liberal socialista -liberal, el socialista de izquierdas, la izquierda-izquierda y la izquierda-radical.
-La segunda hipótesis, necesaria y no forzada (de lo contrario no tendría valor probatorio) para demostrar la tesis, radica en aceptar que hay una guerra (de papel) ya declarada y aceptada entre los dos periódicos. Hoy día ya evidente, y con anterioridad soterrada.
-Y la tercera y última hipótesis, también fácil de aceptar (por indiscutible) es que la lectura diaria de un periódico (máxime como los citados) marca, condiciona el pensamiento.
Establecidas las hipótesis, la tesis (lo que hay que demostrar) es que España se está dividiendo en "paisanos" y "mundanos” (esta nomenclatura, por evidente, no necesita explicación).
La demostración, al estar ante un fenómeno sociológico, sólo puede venir de la percepción de lo observable.
Y en efecto, eso es apreciable en cuanto comprobemos que el grueso de lectores de uno u otro medio tienen perfiles diferentes.
Usted mismo puede apreciar los perfiles de cada prototipo y reconocerlos.
PERFIL DE LOS PAISANOS
Utilizan la prensa que leen como signo externo de "riqueza"(espiritual).
Se creen que El País da más prestigio a quien lo lee y les parece que leer El Mundo les desmerecería ante sus amistades.
Ellos no leen prensa-amarilla (creen), están por encima del bien y del mal.
Si son del PSOE son felices, ya que su periódico es como si mamá les pusiera todas las mañanas Bálsamo Bebé.
Si son de IU sufren el mayor de los desprecios, pero se consuelan pensando que la culpa la tiene Anguita, por no ser más bueno; y al fin y al cabo, en política internacional, como ese periódico ninguno (claro, como la política internacional no es verificable...).
"Es el periódico hecho por las derechas-disfrazadas para las izquierdas-disfrazadas", porque el Capital que hay tras él, como todo capital es de derechas, y en este caso está disfrazado de PSOE.
Pero a la vez sus fans son de “izquierda-disfrazada”: Votan PSOE y defienden PSOE porque así tranquilizan su conciencia diciéndose de izquierdas, y tranquilizan sus bolsillos al tener la garantía de que al PSOE no le dará por meterse en utopías que hagan peligrar sus ahorros (que suelen ser buenos).
Aburrimiento. Esta es otra de sus características. Descendientes y nacidos a la luz de la conciencia, en la época del Cine de Arte y Ensayo, conservan el espíritu de sacrificio de la época: Uno de los cuales era verse cantidad de películas infumables (y encima con subtítulos) porque daban “chic” y si no, no eran progres.
En consecuencia pueden afrontar el aburrimiento de la prensa que leen con deleite.
PERFIL DE LOS MUNDANOS.
Utilizan la prensa como una fuente más de conocimiento, información y placer.
Leen El Mundo porque se enteran de más noticias, disfrutan de más opiniones, y tienen opción a encontrarse con cualquier curiosidad (aunque sea erótica).
Les importan menos las apariencias y enseñan El Mundo para romper.
Si son de IU disfrutan como locos, porque es el único periódico que se hace ECO de que IU existe.
No obstante, como la dicha nunca es completa, de vez en cuando ven que el grupo de sus amores es criticado, y sobretodo comprueban que el PP es más vitoreado que nadie.
Pero les importa un bledo. Cualquier periódico, como cualquier yogourt, tiene que tener detrás mucho dinero y el capital, ya se sabe, "tira al monte".
EL MUNDO es “el periódico hecho por las derechas para las izquierdas", dicen los paisanos; pero los mundanos responden: No están las izquierdas para hacer ascos a nada, y si para uno que te quiere (aunque sea por dinero) le dices que no ¿con qué te quedas?
Dispuestos a no perder ni un minuto leyendo periódicos-muermo, ni cumpliendo rituales de progresía: leen El Mundo para documentarse, para regodearse, para disfrutar, y porque libertad rima más con calidad de lo que parece.
Aceptando que todos los espejos (periódicos) deforman, hay que aceptar con mayor motivo que EL MUNDO es el mejor espejo porque es el que deforma menos.
FRANCISCO MOLINA MARTINEZ Zamora-14 Febrero-1996,
El texto no fue publicado
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