El Corte Chino

                                                               El    Corte   Chino

-Caray, Gobierna, te has dado cuenta de lo importante  que es Zamora que ya van a poner aquí “El Corte Inglés”.

-Pues tengo mis dudas, Peromato, en realidad no se si se va a instalar aquí “El Corte Inglés” o “El Corte Chino”, que tal y como van las cosas, en algún tiempo va a ser todo Made in China.

-Oye, ¿tienes tú algo contra los chinos?.

-Qué va, en absoluto; es más, confío plenamente en ellos para que se produzca la resurrección de Marx. Recuerda que él dijo que el capitalismo estaba cavando su propia tumba, y va acertar.

-No le veo yo relación al asunto.

-Pues atiende, buen amigo. Él lo que dijo fue propiamente eso; y la tontería de que estaba equivocado porque vaticinó el triunfo del proletariado en un país desarrollado antes que en cualquier otro; y que como eso no ocurrió pues a la basura su saber, son bobadas.

-Pero si China es un país atrasado, ¿cómo va a enterrar al capitalismo?

-Pues llevándolo al absurdo: Mira, la Unión Soviética quiso construir un comunismo en paralelo con una carrera competitiva en armamento y conquista espacial con EEUU; consecuencia, acabó en la ruina económica. Sin embargo, los chinos han aceptado el eslogan occidental de “más competitividad que es el progreso”, y  nos llevan a la ruina, y a la salvación a la vez.

-Ah! Es como eso de “mas madera que es la guerra”, que decían los Hermanos Marx, en aquella película en la que iban destrozando el tren para alimentar la máquina.

-Si Peromato; igualito, siempre que no confundas a Marx con los Hermanos Marx. El capitalismo es el tren que no puede parar, no se sabe por qué, y exige que se destroce todo, vagones, equipaje, planeta, para poder llenar el fogón de la máquina y que esta no pare. Eso es la competitividad .

-Y tu crees que eso es malo?

-Juzga tú. Observa Zamora. Es poca cosa, y sin embargo, fíjate: Hemos pasado del “Bazar Jota” al “Bazar Joting”. La calle mayor lleva granito chino. E incluso un ilustrado ilustre ha pedido que el nuevo puente tenga los ojos más ovalados...

-No, si; la verdad es que todo va siendo chino. Por cierto, que supongo que sabes que lo malo de la calle de santa Clara, no está en que parte del granito sea chino; que es mejor granito que el de Sayago, que ahí tienes la muralla china aguantando más que la de aquí. No; lo impresentable es que resulta más barato, y sin embargo eso no supone que la obra salga más económica; luego ¿quién se queda con la diferencia?

-Pues supongo que entre quien tiene más vista y quien hace la vista gorda. Mira, esto es simplemente que, como ya ocurrió con el textil, en España ya no hay fábricas de ropa, porque sale mejor comprar a China y ponerle una etiqueta de aquí. Por eso, si te metes en Zara, o el mismo Corte Inglés, y buscas, no la marca, sino “quién fabrica” verás que nos llevan por la calle de la Amargura con esto de la competitividad.

-O sea, que tenemos que rezar para que los chinos no fabriquen vinos.

-La competitividad es mala, y no porque gane China. Mira, tú mismo ves que ahora quieren que tampoco tengamos viñas, y que debemos arrancarlas para ser competitivos contra otros. ¿Eso es bueno?.

-Y eso de que el Ayuntamiento de Zamora haya pasado de decirle a un comprador “¿Con IVA o sin IVA?, a ¿El IVA lo pagas tú o yo?”; como en La Vaguada ¿qué es?

-Otro cuento chino, como el de que se acabó el granito.                                   

FRANCISCO   MOLINA