MATE al JAQUE
No creo que haga falta ser el sobrino de Maimónides, para saber que son muchas las cosas que nos traen en JAQUE.
Mi abuela, que si hubiese sido apache o sioux, hubiera pertenecido, sin duda, al consejo de ancianos, decía que la vida era una carrera de obstáculos, lo cual casa bastante con lo de que en cuanto nos descuidamos, nos quieren dar jaque, y al final mate.
Para defenderse y dar mate al jaque nuestro de cada día, la Humanidad, desde que es considerada como tal, ha creado diversas culturas o conjunto de conocimientos que le ayuden a vivir mejor.
El ajedrez -algo demasiado serio para ser un juego y demasiado juego como para tomárselo en serio-, según ya han dicho otros, es una de esas creaciones del Hombre que pueden servir para educarnos a dar mate al jaque, o sea que puede ayudarnos a superar dificultades.
El ajedrez es un juego doblemente instructivo -en algunos países es asignatura en determinados niveles de enseñanza-.
Por un lado contribuye a entrenar nuestra mente para el análisis y el razonamiento, por otro educa a la voluntad a ir detrás de la prudencia, y sobre todo es el mejor recordatorio a nuestra soberbia, haciéndonos ver que siempre hay alguien que nos hará sentir mequetrefes.
Pero tal vez, su aporte educativo más valioso, esté en que, practicándolo, nos vamos impregnando de esas cuestiones que son necesarias para el triunfo.
En cualquier partida hay tres fases:
La apertura. El medio juego. Y los finales.
La apertura requiere gran cantidad de tiempo dedicado a la teoría y al estudio. El que tiene grandes conocimientos sobre un tema, en principio tiene ventaja.
El medio juego, requiere imaginación, creación y al menos, el suficiente valor como para dejar a la mente en libertad. Valor para ser libres.
Por último, los finales nos exigen, como debemos exigir en la vida paciencia, atención, humildad y, también como en la vida, si ganamos, el saber ganar y si perdemos el saber perder, lo cual es más difícil, se diga lo que se diga.
Es opinión generalizada que el ajedrez es el mejor juego educativo que existe, pero si tú te lo montas de otra forma no te acomplejes, al fin y al cabo en la vida no hay nada como la intuición y tú sabes intuir lo que te interesa.
Paco Molina. Publicado en la Revista de la Universidad Laboral llamada AVE CEI (durante los años 80 del siglo XX se llamó Centro de Enseñanzas Integradas)
Es un texto pues dirigido a estudiantes.