LA BANCA: SU POKER DE ASES.
El sistema político Capitalista tiene un fundamento, una coartada y un fin.
Es Capitalista todo Estado en el que por entender que quien crea riqueza es el capital (dinero acumulado en unas manos) elabora leyes que protegen a los capitalistas.
El fundamento pues de una sociedad capitalista es que exista un Capital (unos capitalistas).
La coartada (moral) es que esos capitalistas crearán riqueza y todos tan felices. .
Siendo pues el fin del sistema político multiplicar el capital de los capitalistas mediante leyes que les protejan y favorezcan.
Por ello el pecado original del Capitalismo es la Banca Privada. Banca que garantice al menos un capital original.
En consecuencia con todo ello, en España, un Estado Capitalista Social y de Derecho, las Leyes deben, por imperativo legal, favorecer a la Banca.
Es decir la baraja está marcada y de ahí la frase de que la Banca siempre gana.
Veamos el poker de ases que hasta ahora, todos los gobiernos democráticos que hemos tenido, le ha dado en el reparto de cartas a la banca:
1º.- Le permite cobrar por todos los servicios que presta (comisiones). Te cobra: Por hacer una transferencia, por tener una tarjeta, por mantener una cuenta, etc. Hasta el punto de que un banco saneado (según dicen ellos mimos) es el que con ese dinerillo es capaz de pagar a su personal, y que el resto de ingresos sean pura ganancia.
Todo ello a pesar de que les hemos hecho el favor de depositar en ellos nuestros ahorros (esos que luego prestan a un interés más alto para hipotecas, etc.).
Esto por no hablar de que no pagan los gastos de comunidad de los pisos desahuciados y no les pasa nada
2º.- Tienen un negocio que llaman “fondo privado de pensiones”. Pues bien, el Estado (Capitalista, claro) para proporcionarles clientes les bajan los impuestos a los ciudadanos que se hagan un plan privado de pensiones (a pesar de que esos ciudadanos tienen un dinero que les sobra y por eso lo apartan a mayores para sus jubilaciones).
Es como si al Corte Inglés el Estado le favoreciera bajándole los impuestos a sus clientes.
Pero por si fuera poco, el Estado (Capitalista) hace leyes para que las pensiones públicas sean ruinosas y que así no quede otro remedio que hacerse cliente de un banco, pagándole un plan privado de pensiones que complete nuestra limosna del futuro.
3º.- Rescate. Aunque hay una controversia sobre si en España lo rescatado fueron las Cajas o los Bancos, lo cierto es que la última crisis económica fue tan mundial que se dio en países que no tenían Cajas de Ahorro, y se decidió rescatar bancos en vez de dejarlos caer.
En España, muy resumido, el asunto fue así: Se invirtió dinero público (o sea de todos) en:
i) Sanear las Cajas para luego regalárselas (ya a flote) a los Bancos. En una operación que convirtió un país con 45 Entidades Financieras, en uno de sólo 9. Barrido que favoreció obviamente a los supervivientes al quitarles competencia.
ii) Pero es que también se dio dinero (público) para el FROB (y de ahí parte al Banco Malo) y que se hiciera cargo de la carga que supone para los bancos tener tantos inmuebles (producto de la rapiña de tanto desahucio).
iii) En incluso puso dinero España para el Fondo de Garantía de Depósitos (el que garantiza a los clientes que si se hunde una Entidad Bancaria se le de a cada uno todo lo que tuviera depositado por debajo de los 100.000 €).
iv) Todo este proceso que según el Gobierno del PP iba a ser gratuito para los españoles porque eran meros préstamos a devolver, resulta que según ese mismo gobierno ha desembocado en que los españoles nos quedemos sin 60.000 millones de euros (que no nos van a devolver), si contamos los prestados para el FGD, y 50.000 millones sin no contabilizamos los entregados para el Fondo de Garantía de Depósitos.
v) Añádase a esto el rescate de Banesto (Mario Conde) en la década de los 90 del Siglo pasado, y el rescate a toda la Banca al comenzar la democracia. Cifras que no se cuantificar por pereza.
4º.- Hipotecas y desahucios. Si el punto anterior habla claramente de cómo se protege, beneficia y se trabaja para la Banca (y por tanto para los poderosos capitalistas, que son sus grandes accionistas), o sea, capitalismo en estado puro, recordemos el trato de favor (a través de las leyes) que reciben los Bancos bajo el concepto de desahucio a la española.
Porque España es de los escasísimos países (no se da el caso ni en EEUU) donde hay unas normas por las cuales el que habiendo comprado un piso, mediante un préstamo, llamado hipoteca, si de repente no lo puede pagar, se queda sin el piso, sin el dinero dado, y con la deuda de lo que tendría aún que pagar si todo le hubiera ido bien.
Aberración que hace que pasemos de un capitalismo en estado puro, a uno impuro, de puro salvaje. Porque vamos a ver, el experto en préstamos es el Banco y no el cliente. Y por lo tanto si se equivoca y da un préstamo fallido el fallo es del Banco y no del cliente, debiendo por tanto el Banco asimilar su error.
Ocurrió que los grandes accionistas de los Bancos, capitalistas ellos que tenían otro negocio consistente en vender pisos, necesitaban que sus presuntos compradores (el ciudadano normal) tuvieran dinero para comprar pisos, ya que es lo que ellos vendían; circunstancia que sólo era factible si los Bancos prestaban el dinero alegremente, sin miedo a nada porque trabajaban con red (el desahucio a la española).
Estrambote: Que el Supremo pasara a ser el Ínfimo, con su sentencia a favor de la Banca en el tema del pago de impuestos relativos a la Hipotecas (que lógicamente debería pagar la Banca puesto que es la que está haciendo el negocio) no es más que la Ley del Dios Dinero.
Un as más que se saca el Poder de la manga a favor de la Banca para que pueda seguir mangoneando a favor de la Sociedad, dado que quien crea riqueza es el ricachón (según el dogma de fe que sustenta al capitalismo).
Aunque en verdad, en verdad os digo, que no es cierto que una empresa cuanto más grande sea cree más puestos de trabajo, como muy bien ha demostrado la mismísima Banca, que cuanto más crece menos empleados tiene.
Paco Molina. Zamora 8 de Noviembre del 2018.
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