Síndrome de “Yo Soy el Rey”.
Es este un ramalazo consistente en que cuando se colabora con alguien - coordinadoras, asociaciones de vecinos, etc.-algunos comunistas no sólo se creen en posesión de la verdad, sino que actúan como si la tuvieran, pudiendo hacer incómodo el trabajo en grupo.
Este síndrome hay que evitarlo siempre, pero mucho más ahora que el PCE ha entrado en ese gran proyecto que es Izquierda Unida, donde hay que trabajar entre iguales para organizar una plataforma de cambio, que se convierta en alternativa y lo realice en el futuro.
Si luchamos por una sociedad en que de verdad se tenga en cuenta que todas las personas son iguales, seámoslo ya.
En el camino que recorremos está la meta hacia la que vamos.