Sirva el ejemplo que sigue para entender bien lo que es el machismo.
Se trata de la boda de Mette-Mary con el rey de Noruega.
Para que se pudiera producir el enlace, ella hubo de pedir perdón públicamente, ya que era madre soltera y alguna otra simpleza.
Humillación a la hembra.
Sin embargo, él, el macho, no tuvo que pedir perdón por ser rey. (Ustedes entienden).
El machismo existe al menos desde que existe la Historia (no mas allá de 20.000 años) y aunque se nos vendió que las cosas son como son porque no podrían ser de otra manera (ni debían), algo intuyeron las mujeres de que los hombres hacían trampa, porque ahí están Las Águedas, que aunque folclóricas como ellas solas, parecían intuir la verdad cuando pidieron un día para representar la farsa de que las mujeres mandaban.
Mientras el resto del año mandan los hombres (como esta mandao), entre la fiesta de las Aguedas y el día de la Mujer Trabajadora del 2001 todo indica que La Guareña ha vencido al señor Valín en la lucha porque no se colocara en Guarrate una Incineradora Experimental.
Y es en este periodo, entre tanta festividad femenina, cuando el machito de la Junta se ha rendido aunque no lo diga, pero lo dicen los hechos.
Obsérvese como han pasado de decir (salvo el alcalde de Guarrate que anda un poco despistado) que la incineradora era inocua a que ahora van a hacer pruebas para ver si lo es.
Eso es una rendición con condiciones.
Y para mayor gloria de la Plataforma en Defensa de La Guareña hay que decir que esta victoria ha caído en estas fechas, porque tal plataforma ha sido sobre todo un rugido de mujeres en defensa de su casa, su terruño y sus criaturas.
Bastaba con ver las manifestaciones para verificar quienes llevaban "los pantalones puestos".
Y así llegamos al feminismo que tanto tiene que ver con esta fiesta pagana (por antimachista) que es el Día de la Mujer Trabajadora.
Fiesta sin festividad, es decir sin día de descanso, para que quede claro quién manda.
Pues bien, ya que de feminismos estamos, hay que convenir que en España parece limitarse al tema de las cuotas en los partidos, a la equiparación salarial y a las condiciones que faciliten a las mujeres trabajar fuera de Casa.
Fantástico. Pero a modo de provocación, se trae aquí a colación lo que es una lucha sin tregua dentro del feminismo mundial desde hace casi un siglo.
Se trata de la posición a adoptar por las mujeres respecto a la cuestión sexual.
Resulta que en esto hay hoy grandes bandos. Las denominadas "feministas-culturales”, que opinan que en efecto la mujer es diferente al hombre, siendo los valores de ellas superiores a los de ellos, y que entienden que la permisividad sexual es un truco del macho para abusar aún mas de las mujeres, por lo que hay que oponerse a ella, aceptando como mucho las parejas de homosexuales y de lesbianas, ya que la pareja es la fórmula mágica, mientras que el sistema político carece de relevancia en el tema.
Y están, por contra, las "feministas-radicales", que consideran que la opresión de la mujer por el hombre tiene como base fundamental la dictadura sexual sobre las hembras, y que entienden que hombres y mujeres son iguales y que por tanto no debe haber límites en el mundo del sexo, si previamente hay igualdad entre las personas y que el tema político es clave.
Como normalmente no se oye ese debate en España y menos en Zamora, quede aquí expuesto y a callar, que hoy no es mi día.
Aunque si.
FRANCISCO MOLINA. La Opinión de Zamora. Comienzos del SXXI. Imperecedero
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