domingo, 9 de febrero de 2020

POBRECITOS JÓVENES


                                   POBRECITOS    JÓVENES
Ya hemos comentado que hay gentes que con tal de no pedir la igualdad de todos porque todos somos iguales son capaces de cualquier cosa.

            Ahora está de moda defender a los jóvenes y a las mujeres, lo que usando eso del conjunto intersección consistiría en querer resolver los problemas de las “lolitas”.

            Defender a las mujeres que llevan millones de años “hechas unas esclavas”, en feliz frase de ellas mismas, es lógico, pero salir por los jóvenes es un sinsentido. ¡Por qué jamás han estado los menores de 35 años mejor! (Que en esa edad ha definido el partido en el Gobierno al “joven” para eso de las viviendas de alquiler).

            Si ya decíamos que el refrán “no le des peces, enséñale a pescar” es bastante interesado y capitalistoide, porque ,una vez que sabe pescar ¿de qué le sirve con este sistema social?. (O es que los que están en paro  no saben pescar). Pues vamos ahora contra ese otro engañoso.

            Se trata del que dice que “la justicia no es tratar igual a los desiguales, sino tratarlos desigualmente”. 

Cuando eso es lo que hasta ahora ha sido el pan nuestro de cada día desde que existe este tipo de sociedad. Si, porque desde que existe la civilización se ha dicho que no todos éramos iguales, y acto seguido se les ha dado a los desiguales según sus méritos. 

Así, siempre se ha llevado más el Rey, luego los nobles, así mismo los curas y militares, y en proporción a sus méritos y diferencias los burgueses y banqueros, por no hablar de futbolistas ,etc. etc. 

Es decir todos los males de la humanidad vienen de tratar distinto a los “desiguales”.

            La misma Zamora cuando su “desigualdad” consistía en ser centro de la reconquista (contra los árabes) fue tratada mejor porque al Poder le resultaba útil. Ahora, en que su desigualdad la hace inferior, trato desigual recibe y trato de inferior. 

Incluso si es cierto el rumor de que el “Ayunta-PP” va a hacer el puente en la capital, por fin, aguas abajo, pero por donde decía la segunda opción del Ingeniero Arenas, es decir desde debajo de la puerta del Obispo hasta los Pelambres, está claro que lo que se pretende es ahorrar cuántos euros se pueda yendo de calle a calle y no teniendo ni que expropiar, ni que alargarse. 
           
Ah! ¿Que los progresistas cuando hablan de tratar desigualmente a los desiguales se refieren a dar más a los que menos tienen por culpa de su desigualdad? Pero si así es, porque no lo explican más claro y dicen que porque todos somos iguales a todos se nos va a hacer tener lo mismo.

Lo contrario lleva a sin propósitos como el de la Sociedad Protectora de Jóvenes, cuando resulta que están como jamás. Toma claro, con excepciones. 

Por ejemplo los hijos de los obreros, muchos de ellos las están pasando canutas. Pero ¿por qué? Porque sus padres, o sea gente no joven, tienen problemas al no considerárseles iguales a los catedráticos, los cirujanos, los comerciantes....

            Pero la juventud no presenta ninguna diferencia, ni siquiera histórica. Verdad es que si hoy no salen de casa hasta los treinta y tantos porque no encuentran trabajos solventes, o se acaba con el paro de todo el mundo, o los colocaremos a ellos mandando al paro a sus padres.

            Por lo demás estar en casa les da ventajas. Cobijo gratis, comida exquisita (la de mamá), habitación con derecho a achuchones (que era por lo que antes, al no ser así, se casaba mayormente la gente) . De esta manera, hasta con un trabajo basura se puede tener coche, viajar y consumir, o sea, crear riqueza. Que en esto consiste la economía  del Capital, en que otros compren lo que tú vendes aunque no se sepa para qué, ni sirva para na.


            Además, cuánto más tarden en casarse, más tardarán en divorciarse.

FRANCISCO MOLINA. La Opinión de Zamora. Año 2004 

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