AL ALCALDE DE MORALEJA DEL VINO

AL ALCALDE DE  MORALEJA DEL VINO

He tenido ocasión de leer un escrito suyo en el diario LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, en el cual me critica, es decir me da consejos para que sea mejor diputado provincial.

Con el deseo de que usted esté mejor informado paso a decirle:

Como recordará, en la escuela nos decían que había tres clases de líneas: las rectas, las curvas y las mixtas, siendo estas últimas las que tenían tramos rectos y tramos curvos (es decir, tramos esencialmente diferentes).

Pues bien, por eso el Grupo Mixto de la Diputación se llama así, Mixto, porque en él hay dos diputados que no tienen absolutamente nada que ver en lo político, o sea distintos.

Yo, como diputado por Izquierda Unida, no sólo no he puesto ni una pega burocrática al funcionamiento de la Diputación como usted insinúa, sino que en ocasiones he aceptado bordear la norma (a propuesta del equipo de gobierno) para acelerar la adjudicación de obras.

Por ejemplo, en ocasiones los alcaldes hacen tarde sus peticiones y, o les dejas sin obras, o paralizas todo, o aceptas consultas informales de los técnicos.

Como diputado por IU hago el trabajo que me encomienda el grupo y como nos sobra fuerza, en la Diputación seguimos aportando ideas buenas para la provincia (la última la creación de un Consejo Escolar Provincial, tan importante entre otras cosas para ayudar a diseñar un mapa escolar), pero además, creemos necesario investigar la corrupción pasad y en eso también estamos.

Desde el año 1983 al 1991, por culpa de la corrupción de quienes gobernaron en aquellas fechas, se han perdido en obras para la provincia, por lo menos 5.000 millones de pesetas.

Fíjese cuantísimas cosas se hubieran podido hacer a mayores (alguna sin duda en Moraleja); porque 5.000 millones son nada menos que un campus universitario.

Comprenderá entonces que es necesario expurgar responsabilidades.

Mire, cuando un equipo de gobierno con mayoría absoluta no funciona, desengáñese, nunca es por culpa de la oposición.

Hacen lo que quieren, y sírvale de ejemplo que no aceptaron algo tan normal, sencillo y útil como ese Consejo Escolar Provincial que proponía IU.

Pues bien, por lo mismo, son ellos los culpables de lo que usted como alcalde vea que funciona mal.

Francisco Molina Martínez (Zamora). Diputado Provincial. La Opinión de Zamora. Entre 1995 y 1999